La vit. C es un gran antioxidante, y una gran transportadora de energía al interior de las células. Una de sus principales actividades es la de reducir el exceso de acidez en los tejidos que es el inicio de un sinnúmero de patologías desde las más leves hasta las mismas patologías degenerativas.
El ácido Ascórbico como también es conocida la vitamina C actúa a nivel de virus y bacterias inactivándolos mediante la reducción de moléculas de oxígeno.
Con buenos resultados se usa en las toxico-dependencias (dr. Alfred F. Libby – California), en la esquizofrenia ( dr.Carl Pfeiffer).
El ácido Ascórbico se elimina por la orina, por lo tanto su abundante eliminación como en el caso de terapia intravenosa, protege la mucosa vesical en caso de degeneración de la mucosa vesical.
La capacidad del organismo de absorber la vitamina C es reducida por el humo, el estrés, la fiebre elevada.
La cocción de alimentos contenientes Vitamina C, en ollas de cobre la destruye, así como el transporte de los alimentos, la luz, el aire
El organismo aumenta su necesidad en relación con el peso, la edad, las enfermedades sobre todo si crónicas e/o degenerativas, los procesos infecciosos, las heridas, las cirugías, las dietas hiperprotéicas de los atletas, los anticonceptivos, la lactancia, el etilismo, la diálisis. Se recuerda que en caso de infarto de miocardio, la cantidad de radicales libres que se libera es enorme, y se comprende la importancia del uso del ac. Ascórbico en altas dosis.
Funciona también como pro-vitamínico, transforma el ac. Fólico en folínico, protege la tiamina, riboflavina, ac. Pantoténico, vit. A y vit. E de la oxidación. Reduce los niveles de colesterol.
Para obtener grandes resultados se necesitan grandes dosis de ac. Ascórbico, lo que no es posible por vía oral debido a los límites de absorción y los trastornos gastro-intestinales. Por vía intravenosa hasta hoy no se han reportado efectos colaterales, se puede alternar a la vía oral.